COSAS GRACIOSAS

Recuerdo claramente el dìa en que decidì estudiar derecho, fue un dìa de noviembre, dìa de sol como hoy, como ayer; ahora que lo pienso tal vez mis razones fuertes no fueron las que debieron ser, es decir, no lo vì como vocaciòn , aùn ahora dudo que lo sea, en ese entonces mi ùnico afàn fue borrar esa imagen de colegiala tìmida a la que dijeron no matarìa ni una mosca, y encontrè su antònimo en una mujer vestida de sastre,con portafolio en mano, peleando por defender los derechos de los demàs.

Una mujer segura, que irradiara una mezcla de respeto y temor; y a todo ello se le sumara el estilo y glamour. Siempre bella ,siempre imponente, en pocas palabras de imborrable presencia.

Esa fue la mujer que tomè como ejemplo, odiè sin razòn a aquellas mujeres que se dejaban subyugar por los hombres, no por feminista frustrada como muchos podrìan pensar, sino porque de por sì a mi parecer el mundo està acostumbrado a tratar a las mujeres como si no pudieran defenderse solas, eso realmente me revienta, y màs aùn cuando son las mismas mujeres las que generan esta clase de ideas.

No soy el mejor ejemplo para decirle a alguien :"sigue tu vocaciòn" , yo estoy por terminar una carrera de la que no estoy segura que lo sea. Pero saben no me cambiarìa de derecho por nada, la carrera me diò mucho y mis motivos algo impensados o impensables,me dieron las fuerzas para trabajar en ese modelo que quiero ser y que espero algùn dìa ser, no creo aùn que sea mi vocaciòn pero si es el modo de vida que quiero vivir.